Empresarios deberán probar con mayor rigor la “materialidad” de sus operaciones ante el aumento de auditorías fiscales

Empresarios deberán probar con mayor rigor la "materialidad" de sus operaciones ante el aumento de auditorías fiscales

Por: Héctor Herrera 

La supervisión fiscal se endurecerá a partir de 2026 y las empresas deberán estar preparadas para demostrar, con documentación precisa y verificable, que operan de manera real. Así lo advirtió Martha Romo, directora general de Admintek Solutions, durante la Convención Anual de Franquicias, donde subrayó que la autoridad incrementará las auditorías con el objetivo de ampliar la recaudación y detectar irregularidades.

Romo explicó que el Servicio de Administración Tributaria puede revisar a cualquier negocio, incluso si está al corriente de todas sus obligaciones. El proceso ya no depende únicamente de faltas evidentes, sino que puede activarse de forma aleatoria. Por ello, la especialista enfatizó que las empresas deben tener lista la llamada materialidad, es decir, el conjunto de elementos que acreditan su existencia y actividad económica.

La contadora detalló que la documentación indispensable incluye contratos firmados ante notarios, órdenes de compra, correos electrónicos que respalden transacciones, fotografías de ventas y adquisiciones, recibos de pagos al IMSS y evidencia de infraestructura y personal. Todos estos elementos permiten a la autoridad confirmar que el negocio no es una empresa fantasma y que sus operaciones corresponden a lo declarado.

Un punto que generó especial atención fue la posibilidad de que, a partir de enero de 2026, los auditores trabajen bajo metas internas para reportar irregularidades. Esa presión podría traducirse en revisiones más frecuentes y estrictas, lo que aumenta la necesidad de tener la información organizada y lista para entregarse de inmediato. Romo advirtió que, aun cuando una empresa cumple con sus declaraciones y pagos, si no puede demostrar la materialidad de sus operaciones, se expone a sanciones.

Ante este nuevo escenario, la especialista recomendó a las franquicias y a todo tipo de negocios contar con asesoría profesional. Contadores, abogados y despachos especializados pueden ayudar a integrar correctamente los documentos, ordenar la información y fortalecer los procesos internos. La clave, afirmó, es prevenir cualquier observación mediante un expediente completo que permita responder sin demoras a las solicitudes de la autoridad.

Romo concluyó que una empresa con infraestructura comprobable, personal registrado y documentación consistente no debería enfrentar contratiempos durante una auditoría. Sin embargo, insistió en que la preparación es esencial, ya que el entorno fiscal será más exigente y la verificación de la materialidad se convertirá en un requisito central para evitar conflictos con la autoridad.