Rojo de la Vega impulsa reforma para que las alcaldías recuperen lo que generan y fortalezcan servicios públicos

Rojo de la Vega impulsa reforma para que las alcaldías recuperen lo que generan y fortalezcan servicios públicos

Por: Inés Arroyo 

 En medio de la discusión presupuestal para 2026, Alessandra Rojo de la Vega, alcaldesa de Cuauhtémoc, presentó ante el Congreso de la Ciudad de México una iniciativa que busca transformar la forma en que se distribuyen los ingresos locales provenientes del impuesto predial y los derechos de agua. La propuesta, calificada por la alcaldesa como una medida "histórica", pretende que una parte de estos recursos regrese directamente a las 16 alcaldías, en lugar de concentrarse casi en su totalidad en el Gobierno Central.

Rojo de la Vega argumentó que el actual sistema de recaudación ha mantenido durante años una "injusticia estructural" contra las demarcaciones. A pesar de que las alcaldías tienen la responsabilidad de mantener vialidades secundarias, espacios públicos y servicios básicos, no reciben proporcionalmente los ingresos que se generan en dichos territorios. Esta brecha, señaló, limita la capacidad de respuesta ante necesidades urgentes como bacheo, fugas de agua, drenaje, limpieza o alumbrado.

La iniciativa contempla reformar el Artículo 55 de la Constitución de la Ciudad de México, así como una serie de leyes fundamentales: la Ley Orgánica de las Alcaldías, la Ley de Austeridad y Transparencia y la Ley de Acceso, Disposición y Saneamiento del Agua. Con estas modificaciones, se busca otorgar a cada alcaldía una mayor autonomía financiera, de manera que puedan gestionar recursos propios y destinarlos directamente a las demandas más inmediatas de sus habitantes.

"Las alcaldías no pueden seguir operando con recursos insuficientes mientras la ciudad exige resultados inmediatos", sostuvo Rojo de la Vega durante la presentación. Añadió que su propuesta no pretende desarticular la recaudación central, sino "corregir un modelo que concentra el control financiero y debilita la capacidad de los gobiernos más cercanos a la gente".

El proyecto fue respaldado por el grupo parlamentario del PAN, que destacó la relevancia de descentralizar recursos para mejorar la gestión pública. Desde esta bancada se subrayó que acercar el dinero a las demarcaciones permitirá atender con mayor eficacia los servicios urbanos que afectan directamente la vida diaria de millones de capitalinos. En contraste, legisladores de Morena llamaron a analizar cuidadosamente los alcances fiscales de la iniciativa, al considerar que una redistribución de recursos podría alterar la planeación financiera de la ciudad.

Más allá de las posturas partidistas, especialistas en administración pública destacan que esta reforma podría marcar un cambio de fondo en el modelo financiero de la capital, pues ampliaría las facultades de las alcaldías para ejercer recursos sin intermediación y facilitaría una gestión más ágil en temas como alumbrado, seguridad, áreas verdes y mantenimiento de infraestructura.

La propuesta ya fue turnada a comisiones, donde continuará el proceso de análisis y dictaminación. Aunque su aprobación dependerá del consenso legislativo, Rojo de la Vega insistió en que la capital requiere un sistema fiscal más justo y equilibrado. "No pedimos privilegios, pedimos que a las alcaldías se les devuelva lo que generan para poder responderle a la gente", afirmó.

De avanzar, la iniciativa podría redefinir la relación financiera entre el Gobierno Central y las demarcaciones, y abrir la puerta a un modelo más autónomo, eficiente y cercano a las necesidades ciudadanas.